Sólo Dios sabe cuánto pesa una Oración.
Tu eres una bendicion
Una mujer pobremente vestida, con un rostro que reflejaba derrota, entró a una tienda. La mujer se acercó al dueño de la tienda y, en la manera más humilde, le preguntó si podía llevarse algunas cosas a crédito (lo que los puertorriqueños conocemos como fiao).Con voz suave le explicó que su esposo e
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